Allá por abril aproximadamente, desde Esdor me hicieron llegar su famosa crema de pies para probarla. Entre que aún era invierno y una cosa y otra, no me había puesto a probar el producto, y la verdad es que tampoco sabía cuanto uso le daría, ya que generalmente no tengo los talones agrietados ni la piel del pie especialmente seca.
Pero, por algún motivo, cuando llegó este año la época de sandalias me quedé un poco horrorizada al ver que tenía los pies y los talones en bastante mal estado. Y ya no es un tema estético, es que no tener la piel de esa zona bien nutrida e hidratada hace que las sandalias rocen y aparezcan heridas con mucha facilidad. Así que pensé, ¡pero tengo una crema reparadora para pies! y comencé a usarla.
Este bálsamo, presentado en un tubo de aluminio de 75 ml., está compuesto por una mezcla de extractos vegetales dónde destaca (como en todos los productos de Esdor) la uva. Muchos cosméticos utilizan uva en su composición ya que los polifenoles tienen efecto antioxidante y antiinflamatorio.
Otros ingredientes que encontramos en la fórmula tienen función hidratante y nutritiva, como la manteca de karité o refrescante como el extracto de fruta de la pasión o limón.
Según la etiqueta, el Bálsamo Reparador Vid Divine tiene un 92% de ingredientes de origen natural. Lo cierto es que Esdor centra sus esfuerzos en conseguir productos lo más limpios posibles y aunque no cuentan con certificados tipo Ecocert (al menos hasta donde yo he visto) sí que hay un interés en trabajar en la medida de lo posible con ingredientes naturales.
La crema tiene una textura muy ligera y tras dar un masaje se absorbe rápidamente dejando una sensación de frescor que en verano va la mar de bien. Además, gracias a la mezcla de extractos de frutas, tiene un aroma muy agradable, refrescante, que recuerda a frutas de verano (sobre todo cítricos).
Desde la primera noche noté sus efectos, ya que me desperté al día siguiente con la piel más hidratada. Utilizándola de forma regular, además de tener la piel más suave y mejorar notablemente el estado de mis talones, la piel se agrieta mucho menos y hasta las sandalias me dejaron de hacer herida en algunas zonas dónde rozaban simplemente por culpa de la sequedad de la piel.
De momento he decidido continuar utilizándolo en invierno también para no llegar al año que viene con los pies en el mismo mal estado que me encontré al incio de este verano.
De momento he decidido continuar utilizándolo en invierno también para no llegar al año que viene con los pies en el mismo mal estado que me encontré al incio de este verano.
¿Habéis probado este bálsamo? ¿Qué tratamientos usáis para mantener los pies en buen estado?